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25 de septiembre de 2013

El martes 17 de septiembre los alumnos de la Escuela Industrial Superior, (que depende de la Universidad Nacional del Litoral) de Santa Fe capital, realizaron una raviolada en la calle, por presupuesto. 

Raviolada por presupuesto

Estudiantes de la Escuela Industrial Superior de Santa Fe Capital

La actividad fue organizada por el Ceeis (Centro de Estudiantes de la Escuela Industrial Superior) y el CEIQ (Centro de Estudiantes Facultad de Ingeniería Química), para reclamar presupuesto y las respuestas por parte de la UNL en relación a la conformación de la cantina. La movilización consistió en una raviolada para los alumnos y una muestra del taller de teatro al aire libre. Participaron aproximadamente 300 estudiantes. 

La actividad fue organizada por el Ceeis (Centro de Estudiantes de la Escuela Industrial Superior) y el CEIQ (Centro de Estudiantes Facultad de Ingeniería Química), para reclamar presupuesto y las respuestas por parte de la UNL en relación a la conformación de la cantina. La movilización consistió en una raviolada para los alumnos y una muestra del taller de teatro al aire libre. Participaron aproximadamente 300 estudiantes. 
Hablamos con los chicos del Ceeis, quienes nos cuentan qué los llevó a organizar esta actividad. 
Natalí Kessler, secretaria de Asuntos Estudiantiles, nos cuenta cómo y por qué se dio la raviolada: “El problema con la cantina de la escuela viene de hace casi un año. Quimera (conducción del Ceeis) se consolida como agrupación al tomar la problemática de los precios de la cantina. Juntando más de 600 firmas de alumnos y profesores,  conseguimos llamar a una nueva licitación y meter en el pliego un piso mínimo de 100 becas mensuales de comedor. Desde el comienzo tuvimos trabas para esto. Las autoridades de la UNL se encargaron de demorar cada paso que dimos en esta lucha. En mayo, el Consejo asesor del cual también somos parte elige el nuevo oferente, consiguiendo 200 becas de comedor mensuales. A partir de allí estamos esperando que la UNL firme el contrato con el mismo. Mientras, acordamos con el director hacernos cargo de una cantina provisoria, el Centro de Estudiantes y los sextos años, por 15 días (tiempo  que iba a tardar en instalarse la nueva cantina).
Hace 49 días que los estudiantes nos estamos haciendo cargo de nuestra propia comida, y entendemos que esto es algo que deberían garantizarnos las autoridades. No tenemos noticias del contrato, ni de la cantina y mucho menos de las 200 becas. Decidimos hacer una raviolada para que las autoridades vean la necesidad que hay de una cantina y de un comedor, además para demostrar que se puede comer a un precio accesible (el bono sale $7 incluyendo ravioles, pan, jugo y una fruta)”. 
 
El presupuesto de Nación 
es una miseria
Camilo Parisi, presidente del Ceeis, nos habla sobre los números que se están manejando en la EIS: “De abril de 2011 a abril de 2012, la UNL destinó $50.000 a la Escuela Industrial Superior para todo el año, que se gastó en el primer trimestre. La Cooperadora (Asociación de Padres) en el mismo período destinó $85.000. Este año la cuota de la cooperadora aumentó ($50 por mes por alumno), pero el presupuesto de la UNL fue de $60.000; si tenemos en cuenta el 30% de inflación actual, destinó $5.000 menos que el año pasado. De entrada, el presupuesto que manda el gobierno nacional es una miseria, lejos de enfrentar esto, las autoridades de la UNL, pertenecientes a la Franja Morada, ajustan sobre el ajuste, y los perjudicados somos los estudiantes”. 
Además, Camilo nos cuenta que lograron revivir un Taller de Teatro (que había sido cerrado durante la dictadura militar junto a otros talleres) a pesar de que la UNL no destine un peso para éste tipo de actividades. “Las autoridades nos dijeron que cerremos el Taller de Teatro porque no había plata para bancar el sueldo del profe, así nos enteramos del mísero presupuesto destinado a nuestra escuela. Hicimos cálculos: una fuente que se construyó en la Ciudad Universitaria, costó $900.000.  Con eso, podríamos pagarle al profe de Teatro durante 187 años. Evidentemente, la Universidad y el Estado Nacional, tienen la plata, pero el bienestar estudiantil no es su prioridad”. 
“Siempre el presupuesto tiene una puja política, que deja a los chicos en el medio” dijo Leyla, vicepresidenta del Ceeis. La organización del evento estuvo a cargo del Centro de Estudiantes, liderado por la agrupación Quimera. “Nosotros vemos que la problemática es de los chicos y vinimos a ocuparnos de eso”, afirmaron sus integrantes. 
Piru Galuccio, presidente del Cuerpo de Delegados, nos comenta: “Así como nosotros planteamos esto en nuestra escuela, lo mismo podría plantearse en otras. Esta raviolada es una demostración a los estudiantes de las escuelas públicas de que tienen el derecho de reclamar.”
Este reclamo tuvo el apoyo de la FESO (Federación de Estudiantes Secundarios y Organizados) integrada por los Centros de Estudiantes de la Escuela Bustos, Sara Faisal, Comercial, Industrial y el IPEI, que como dijo uno de sus integrantes, Gustavo Gutscher: “Organizarnos y colaborar entre distintas escuelas crea una sensación de comunidad, necesaria para los chicos que queremos luchar por una mejor educación pública. No sólo para los alumnos, sino para abrir la Escuela al resto de la Sociedad”.